La agencia noticiosa AP ha empezado a replicar algunos comentarios
reparadores o abiertos “desmentidos”, motivados por la publicación el
pasado 3 de abril (2014) de una investigación de seis de sus
periodistas con el título de “US Secretly Built ‘Cuban Twitter’ To Stir
Unrest”.
Dicho sea de paso que el 3 de abril fue el día escogido por Alan
Gross para iniciar su protesta en Cuba. No obstante, el pequeño párrafo
atribuido a Gross para comunicar su huelga de hambre o ayuno, no
establece una relación causal explícita del tipo: Hago esto porque he
leído tal cosa en AP. (“I am fasting to object to mistruths,
deceptions, and inaction by both governments, not only regarding their
shared responsibility for my arbitrary detention, but also because of
the lack of any reasonable or valid effort to resolve this shameful
ordeal”).
Es lógico que las partes interesadas hayan ido “desmintiendo”, o al
menos relativizando, los fragmentos de la publicación de AP que resultan
alusivos a su desempeño en el tema del ZunZuneo. No por una cuestión
ideológica o política sino porque habrían en juego posibles violaciones
de reglas y normas administrativas que pudieran terminar en el
cuestionamiento de la idoneidad para el empleo. Lo de la pregonada
libertad y democracia en Cuba o es una ilusión superestructural (“falsa
conciencia”, ideología “a la alemana”), o es un pretexto.
Tendencialmente considerando.
Y era previsible además que AP conteste esas mismas reacciones a su
investigación, sobre todo porque ha asegurado que tiene bajo la manga un
caudal de información disponible. Hasta el momento no mostrado
suficientemente. Específicamente se aseguró que AP había conseguido “…más de mil páginas de documentos sobre el desarrollo de ZunZuneo” y “numerosas entrevistas con personas que participaron en el proyecto”.
Por lo pronto AP ha salido a precisar (Ver variante en ENH de esta nota de AP)
que aunque los mensajes diseñados para ZunZuneo comenzaban explorando
la “frivolidad” de los cibernautas, eso no impedía que a algunos (sub)
contratados se les encargara mensajería de tipo explícitamente político.
Al parecer en una dosis bien calibrada, porque según AP en algún
documento se encontró la frase “NO: DEMASIADO POLITICO”, que probaría
que el sobrecumplimiento o sobre dosis política del servicio contratado
podía ser contraproducente (AP anota a su propia referencia: “Al parecer este texto fue rechazado” / “No”, escribieron los organizadores, en un aparente rechazo a ese texto. “Demasiado político”.).
Como suele suceder en el tratamiento “de corte periodístico” de los
temas cubanos, las agencias internacionales de prensa estilan citar
explícitamente, con nombre y apellido, al personal de base; protegiendo
con alusiones generales (“un entrevistado”, “una persona”, “un creador
radicado en tal lado”, etc.) a gente de más relevancia. Sería bueno que
AP, además de citar la identidad de Twitteros de fila, también revele la
de cibernautas de mayor rango implicados en ZunZuneo.
Emilio Ichikawa
Tomado de http://eichikawa.com/
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