jueves, 20 de junio de 2019

Proyecto Rebelión Nacional: una trampa para incautos


Dos contrarrevolucionarios de poca monta radicados en el exterior, Lázaro Mireles Galbán y  Wilfredo Beyra, –devenidos en  fantoches de turno dentro de la desunida contrarrevolución anticubana que los ha marginado en varias oportunidades  y envenenados por el apego al protagonismo mediático y búsqueda  de reconocimiento–, se han propuesto a lanzar un descabellado y utópico proyecto: convertir el venidero 13 de julio en una supuesta movilización nacional contra el gobierno cubano. A tanto demérito y deshonra acumulados suman hoy dos detestables actos: incitar desde lejos a otros para que asuman protestas desde la comodidad de sus hogares y el mentir al mundo sobre la connotación de un show con cuatro gatos que será desinflado por la cólera y reprobación de todo nuestro pueblo.
Mireles Galbán y Wilfredo Beyra, auto titulados líderes de Acciones por la Democracia y el proyecto opositor Rebelión Nacional, radicados en España y EEUU respectivamente, son los convocantes del llamado “Día R”, lo cual ha sido visto con duda por otros cabecillas recelosos de que les mellen su protagonismo y han puesto en entredicho el éxito o conveniencia del mismo, lo que cualquier gente con lógica puede predecir.
Aunque dicen contar con el apoyo de otros contrarrevolucionarios –algunos desde el exterior y de otros que no acostumbran a movilizarse directamente– lo cierto es que el prometido apoyo de CubaDecide, Somos+ y del llamado  Partido Nacionalista Cubano (PNC), parece que se esfumará antes del sonado día R. Algo parecido sucederá con las provocaciones que planean montar simultáneamente para ese día en Estados Unidos, Canadá, Chile, Perú, Uruguay, Inglaterra, Alemania, España y Suecia.
Aunque pretensiosamente dicen cuidar bajo el anonimato a los organizadores de este show dentro de Cuba, puedo garantizarles con un 100 % de certeza que las autoridades ya  los conocen y ninguno de ellos asomará la cabeza en una calle cubana. Estos cuatro gatos están sobre aviso.
No quiero entrar en detalles sobre los organizadores de este show, salvo decir que Mireles Galbán busca lograr su añorado sueño de entrar en EEUU luego de su frustrado periplo por Alemania y su actual estancia irregular en España, donde realizó un show mediático en el consulado cubano a principios de año. Por su parte, el Beyra residente en Arizona y todavía mal visto por gran parte de la contrarrevolución en Cuba y en el exterior, poco empuje movilizador parece tener. Ahora mismo tiene una ojeriza con el caudillito José Daniel Ferrer quien teme por ver afectado su protagonismo y por haber sido acusado por el citado Beyra de ser agente del G-2 cubano, artilugio que él mismo usa contra sus enemigos o contrincantes.
Lo cierto es que el 13 de julio nada pasará en Cuba, salvo otro día de esfuerzo denodado por parte de nuestro pueblo por seguir venciendo las constantes amenazas de la actual administración yanqui que no tiene escrúpulo de usar payasos para conseguir su utópico sueño de vencer a la Revolución.

miércoles, 12 de junio de 2019

La trama contrarrevolucionaria en el Congreso argentino


Ledezma en el Congreso argentino
El pasado 28 de mayo de 2019  se celebró un encuentro entre miembros de la Cámara de Diputados del Congreso argentino con la llamada embajadora venezolana del títere Juan Guaidó, Elisa Trotta Gamus, quien estuvo acompañada por dos diputados de la derecha integrantes de la AN, José Manuel Olivares Marquina y Ángel Alvarado. Como anfitriones participaron los diputados Waldo Wolff –jefe del grupo parlamentario de amistad con Venezuela–, Cornelia Schmidt Liermann –titular de la comisión de Relaciones Exteriores y Culto de la Cámara baja–, así como Astrid Hummel, Pablo Torello, Ezequiel Fernández Langan, Brenda Austin y Paula Urroz; Lilia Puig, legisladora del Parlasur; Darío Ramírez, coordinador internacional del Plan País de Venezuela; el embajador Carlos Cherniak, director de Asuntos Parlamentarios de la Cancillería Argentina; y Juan de Dios Cincunegui, director general de Diplomacia Parlamentaria, Cooperación Internacional y Culto de la Cámara de Diputados. Les acompañó el actual secretario de Salud argentino, Adolfo Rubinstein, así como un personaje que parece ser la nueva estrella de las conspiraciones contra Venezuela, Cuba y Nicaragua: Luciana Mariel Termine, Directora de Diplomacia Parlamentaria y Cooperación Internacional.
La señora Termine, según fuentes confiables, sirve de apoyatura dentro del Congreso a todo show que se organice en el mismo contra las naciones progresistas antes mencionadas, sirviendo de enlace con otras fuerzas de la derecha en el continente. Ella estuvo implicada en la visita de la ex representante de la mafia anticubana a la Argentina, a principios de mayo pasado, Ileana Ros-Lehtinen, y organizó todos los encuentros de la misma  con diputados de derecha. Asimismo, ha sido la encargada de coordinar con CADAL la actual visita del contrarrevolucionario Ángel Santisteban y de gestionar una frustrada visita al congreso argentino. Ella apenas aparece en las redes sociales como buena conspiradora.
La Termine tuvo a su cargo, a petición de Cornelia Schmidt Liermann,  de preparar una visita del ex alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, a principios de año, con vistas a procurar una denuncia contra el presidente Nicolás Maduro ante  la Corte Penal Internacional, En este recibimiento participaron los diputados Marcela Campagnoli, Paula Oliveto, Carmen Polledo, Miguel Bazze, Fernando Iglesias, Lucas Incicco, Juan Manuel López, Pablo Torello, Marcelo Wechsler, Waldo Wolff y Facundo Suárez Lastra.
Ya yo había denunciado en un artículo titulado “En Argentina se fragua una conspiración contra Cuba y Venezuela”, fechado el 5 de octubre de 2018, un plan de la derecha argentina dentro del Congreso de la Nación, particularmente integrada por diputados del partido gobernante PRO –dirigidas por el diputado Fernando Iglesias, con la venia del propio ministro de Justicia German Garavano, del gobierno de Mauricio Macri, del  presidente de la cámara de diputados Emilio Monzó y la presidenta de la comisión de relaciones exteriores, Cornelia Schmidt Liermann– cuyo siniestro plan es formar una Corte Penal Latinoamericana y del Caribe (COPLA) según aparece el sitio web de la misma.
Alerto sobre estos planes, a cuya cabeza está la derecha argentina con cuyos representantes se reunió el presidente brasileño Jair Bolsonaro, en su visita al país austral, con vistas a conspirar contra los gobiernos de Venezuela y Cuba.