EE UU trata de ganar terreno en Tayikistán.

EEUU está buscando socios en Asia Central. Evidentemente, Washington no se propone que Rusia desempeñe el papel protagónico en esa región.

Expertos norteamericanos en política internacional opinan que está en juego, ni más ni menos, el acceso de Occidente a Asia Central.

El Washington Post prevé una puja geopolítica entre Washington y Moscú por Tayikistán. Hoy este país, fronterizo con Afganistán, reviste gran importancia para Estados Unidos. Las Fuerzas Internacionales de Asistencia a la Seguridad (ISAF) llegan a Afganistán por la llamada Ruta del Norte a través de Uzbekistán, Kirguistán, Tayikistán y Turkmenistán. El congresista estadounidense Dan Burton dijo recientemente que EEUU puede instalar una base en Tayikistán, a cambio de las bases aéreas en Kirguistán. Ahora EEUU tiene la posibilidad de “encubrirse” con Afganistán y la necesidad de asegurar la salida de las tropas – dijo a La Voz de Rusia, el director general del Centro de Información Política, Alexéi Mujin:

—Tal interés será formalizado precisamente de esa manera. La existencia de una base militar dará a EEUU la posibilidad única de tener un punto neurálgico permanente en esa región. Esto apunta, sobre todo, a Rusia y China, cuyas posturas, por ejemplo, sobre el problema sirio, causó gran disconformidad en Washington.

EEUU ve en el espacio postsoviético un espacio para la maniobra política. Sea como sea, tal posibilidad se la ofrecen las propias repúblicas centroasiáticas. Allí los interés de EEUU chocan con la posición de Rusia, que siempre ocupó un lugar especial en la región, considerándola campo de su influencia. Y algunos países esperan obtener beneficios de tal rivalidad –apunta Alexéi Mujin:

—Tayikistán es una región que depende de la influencia exterior y económicamente depende en extremo de los países que la rodean, entre ellos Rusia. Todo esto se conformó históricamente. A cambio de la soberanía, del emplazamiento de bases militares Tayikistán exigirá determinadas preferencias. Al que dé más y prometa más, Tayikistán le brindará más atención en su territorio.

El año pasado Tayikistán, Uzbekistán y Pakistán trazaron el programa de la gira centroasiática de la Secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton. Su visita estuvo precedida por viajes a esos países de altos diplomáticos norteamericanos. Recordemos que últimamente EEUU mantiene un diálogo muy intenso con Tayikistán, al punto que Tashkent suspendió su participación en la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva.

Los medios rusos escriben de las negociaciones entre Tashkent y Washington sobre la creación en la república de un centro de reacción operativa, que después de 2014 se convertirá en una base militar de EEUU. Además, la maquinaria bélica de la OTAN, tras la retirada de las tropas de Afganistán, quedará acantonada en su mayor parte precisamente en Tayikistán.

Es evidente que los procesos de la actual integración euroasiática no encajan en los planes de EEUU. Washington tiene un vasto proyecto geopolítico – dice el director del Centro de Peritación Geopolítica, Valeri Korovin.

—Esto se opera en el marco de la estrategia geopolítica “Anaconda”, que los estadounidenses aprobaron décadas atrás. Consiste en rodear a Eurasia con bases norteamericanas para asfixiar económica y estratégicamente a un gran espacio, en cuyo centro se encuentra Rusia. Esta es una de las fases de la ejecución del proyecto, hacia cuya conclusión EEUU marcha decenas de años.

La presencia militar rusa en la región está representada por la base de Kant en Kirguistán y la base 201 en Tayikistán. Está claro que a Moscú no le complacen los planes de EEUU de desplazar a Rusia de esa región.

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La Voz de Rusia