Oscar Schemel, presidente de la encuestadora alertó al sector
opositor que retirase de la contienda traería consecuencias
catastróficas para sus intereses políticos
El
presidente de Hinterlaces, Oscar Schemel, informó que las encuestas
realizadas hasta el 25 de marzo de 2013 le dan a Nicolás Maduro una
brecha de 20 puntos por encima del candidato de la derecha, Henrique
Capriles Radonski.
Explicó que de acuerdo a las proyecciones que maneja la empresa de
estudio de opiniones la brecha actual puede variar y fijarse para el 14
de abril, día de las elecciones, entre un 14% y 16%.
“Una brecha mayor a la que obtuvo el presidente (Hugo) Chávez el 7 de
octubre, pero con una votación menor porque estamos proyectando el
aumento de la abstención (…) que puede subir alrededor de un 7%”, dijo
en el programa Contragolpe de Venezolana de Televisión.
Resaltó que
se trata del panorama electoral más favorable para el representante del
proyecto revolucionario, mientras que el menos favorable no es
inferior a 10%.
Enfatizó que el único escenario que se observa desde que
se iniciaron los sondeos de opinión desde el 9 de diciembre es el
Triunfo de Maduro.
“No hay escenario donde pueda ganar Henrique Capriles,
salvo que ocurra un evento extraordinario que cambie la correlación de
fuerzas y esos eventos extraordinarios ocurren muy pocas veces en la
vida”, puntualizó.
Schemel atribuyó un posible aumento del clima
abstencionista hasta un 27%, en el caso de la oposición, a la
desmovilización, descontento con el liderazgo de la oposición luego de
las elecciones del 7 de octubre y la caída de la imagen positiva de
este sector.
Por otra parte, indicó que hay personas del lado del
chavismo que al no contar con la figura del presidente Chávez, es
posible que decidan no participar en los comicios presidenciales.
Advirtió que esta amenaza para ambas propuestas puede ser
superada a través de la capacidad de movilización de las maquinarias
electorales.
En relación a la posibilidad de que la derecha retire su
candidatura durante la campaña, consideró que es algo que no debería
ocurrir, dada la mala experiencia que tuvieron en las elecciones
parlamentarias de 2005.
“La oposición debe seguir avanzando, construyéndose como
alternativa, no sólo como fuerza electoral (…) Una retirada electoral
sería catastrófica, porque siguen siendo importante los niveles de
confianza que existen en la sociedad venezolana con relación al sistema
nacional electoral”, acotó.
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