martes, 20 de agosto de 2013

Proyectos contrarrevolucionarios VI: Proyecto Emilia


Gestores del Proyecto Emilia, Biscet al centro


El Proyecto Emilia es promovido por el grupúsculo contrarrevolucionario conocido como la Fundación Lawton de Derechos Humanos. Fue creado por el Dr Oscar Elías Biscet en La Habana, el 9 de enero de 2013, teniendo el apoyo de otros reducidos grupos mercenarios, entre los que destacan el  Comité Pro-Cambio, Consejo Nacional de los Derechos Civiles de Cuba, Frente de Línea Dura y Boicot "OZT", Movimientos Opositores por una Cuba Libre y el Partido Unión de Cuba Libre. Sus matrices políticas las colocan en una página Web: http://proyectoemilia.org, y varios Blogs, todos ellos con soportes en el extranjero, con la finalidad de  recoger firmas de enemigos de Cuba en el exterior para mantener una permanente guerra mediática contra Cuba.

Este Proyecto toma desfachatadamente el nombre de  Emilia Teurbe Tolón, quien fuera la mujer que laboró en el original de la bandera cubana y a quien cabe el honor de haber sido la primera fémina desterrada de Cuba por motivos políticos. La actividad subversiva de este grupo está basada fundamentalmente en la promoción del desconocimiento de las instituciones gubernamentales cubanas, ignorar la Constitución vigente y abrirse espacios en foros internacionales para deslegitimizar a la Revolución.

Dos son sus tareas inmediatas:

- Distribuir el Proyecto Emilia entre la población, empleando para ello a varios connotados contrarrevolucionarios, mediante una paciente labor de zapa y persuasión. Para lograr este fin cuentan con amplio financiamiento desde el exterior.

- Se plantean, inicialmente, recoger entre 10 mil o 15 mil firmas con vistas a darlas a conocer a los organismos internacionales, tales como el Tribunal Criminal Internacional en los Países Bajos y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Hasta el momento, no han podido lograr su objetivo por razones elementales: el apoyo popular masivo a la Revolución, el riesgo de verse descubiertos luego de haber inventado supuestos firmantes realmente inexistentes y contradicciones con otros grupos de la contrarrevolución que desarrollan proyectos similares o parecidos. Otro de los factores a tener en cuenta es que este proyecto no ha tenido el sobredimensionamiento mediático que sus promotores han esperado. 

Las actividades desarrolladas por este grupúsculo violan directamente el orden constitucional legítimamente establecido, lo que le colocan dentro del marco de una agresiva actividad subversiva. Muestra de ello es que, entre los meses de abril a junio organizaron varias provocaciones ilegales, como lo fueron:

- En el mes de abril dictó un curso de formación de líderes en la sede del Frente de Línea Dura y Boicot  “OZT”, en La Lisa, y sesiones de trabajo en Santa Clara.

- En mayo el Proyecto Emilia entró en su segunda fase con la recogida de firmas, con vistas a declarar ilegal la Constitución y la Asamblea Nacional del Poder Popular.

- En junio se proyectó y debatió el documental “Derrocamiento de un dictador” en la sede del Partido Unión por una Cuba Libre, en La Habana. El claro mensaje discursivo era buscar alternativas políticas para instrumentar actividades antigubernamentales.

Sus vínculos a grupúsculos sumamente contestatarios y provocadores, deslegitimizan su falso pacifismo. Entre estos se encuentra el Frente de Línea Dura y Boicot  “OZT”, promotor de actividades de desobediencia social y distribución de propaganda contra el gobierno, vinculado a organizaciones de extrema derecha radicadas en Miami.

El proyecto Emilia, como los tantos que fabrican a diario los mercenarios del Imperio dentro de Cuba, no son más que engendros tendenciosos, cuyo leiv motiv es procurar dinero y otras fuentes de apoyo desde el exterior para que sus organizadores vivan una vida disipada a costa de traicionar a su propio pueblo.

Percy Francisco Alvarado Godoy

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