Terrorismo de extrema derecha, fundamentalismo islámico y espionaje, son las áreas del crimen que mantendrán ocupada a Alemania en 2014, anunció hoy el Fiscal General federal, Harald Range.
"La
célula NSU (Clandestinidad Neonazi), con la sospecha de 10 homicidios y
varios otros delitos, nos puso a la prueba y seguirá siendo así por un
tiempo", subrayó Range en conferencia de prensa.
Además
de la NSU, la Fiscalía Federal investiga a otros cuatro grupos
terroristas de extrema derecha aunque Range aseguró que en ningún caso
existieron sospechas de atentados inminentes.
Cada
uno de estos grupos cuenta con entre cinco y siete integrantes, según
el director del departamento de Terrorismo, Rainer Griesbaum. Se
sospecha que hayan intentado fundar verdaderas organizaciones
terroristas, así mismo se investigan su conexiones con la NSU.
El
descubrimiento de la célula terrorista NSU hace dos años en noviembre
del 2011 sacó a la luz enormes negligencias de los servicios alemanes de
seguridad y de la policía en dar con la matriz neonazi de los
homicidios de nuevo ciudadanos extranjeros y una mujer policía en todo
el territorio alemán.
Range
dijo que paralelamente al juicio en Munich, donde se está procesando a
la integrante del NSU, Beate Zschäpe, siguen las investigaciones acerca
de otros posibles ayudantes externos al grupo.
"El tribunal alcanzó buenos resultados con la recopilación de pruebas. Eso refleja el éxito de las investigaciones", destacó.
Otro
tema central del trabajo de la Fiscalía General fueron y serán las
actividades de espionaje de Estados Unidos, que se conocieron con la
filtración del contenido de los documentos del ex empleado de la Agencia
de Seguridad Nacional (NSA) estadunidense, Edward Snowden.
La
Fiscalía no decidió todavía si denunciará judicialmente las actividades
de espionaje de la NSA y de los servicios de seguridad británicos
(GCHQ) en el territorio alemán. Es este un tema que ocupa buena parte
del debate público y político en este país.
La
Fiscalía General alemana espera todavía informaciones por parte de
otras instituciones y hasta el momento, según Range, no hay pruebas de
que "la NSA y el GCHQ vigilaran de manera sistemática las comunicaciones
de internet y telefónicas en Alemania".
En
este marco, Alemania considera la posibilidad de interrogar al mismo
Edward Snowden, quien recibió asilo político en Rusia y se dijo
dispuesto a colaborar con Alemania.
Después
de las primeras filtraciones de junio, los investigadores abrieron un
"proceso de observación" acerca de las actividades de espionaje de
Estados Unidos.
Además,
desde el pasado mes de octubre las investigaciones se centraron también
en el control del teléfono privado de la canciller federal, Ángela
Merkel, que pudo haber sido espiado durante años.
Por
último, Range dijo que el país mantiene alta el alerta frente al
terrorismo islámico y en este contexto recordó como la fiscalía general
supo prevenir un atentado con explosivos en la ciudad de Bonn.
Range
señaló que unos 200 jóvenes alemanes viajaron hacia Siria y expresó la
preocupación de que un recrudecimiento del conflicto en el país de Medio
Oriente podría tener repercusiones también para la seguridad interna de
Alemania.
De
los 200 que viajaron a Siria no está claro qué tipo de actividades
estén desempeñando en el país, si humanitarias o de otro tipo. En
particular se observan con atención seis casos de ciudadanos alemanes
que volvieron de Siria, aunque "no hay indicios concretos de ataques
inminentes".
Tomado de http://www.planoinformativo.com
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