Al
menos cuatro personas con armas automáticas abrieron fuego contra la sede de la
policía de Dallas, en Texas, Estados Unidos, alrededor de
las 0.30 horas de hoy, luego de colocar varios explosivos caseros –uno de los
cuales explotó al tratar de ser desactivado por un robot. Posteriormente, uno de los atacantes –identificado como James
Boulware-, huyó del lugar en una camioneta blindada, luego de impactar contra
una patrulla e iniciar un recorrido bajo una aparatosa persecución que lo llevó
a un estacionamiento del restaurante de hamburguesas Jack In The Box, en
Hutchins, a unos 14 km del centro de
Dallas.
This is where the Explosive Ordinance Robot attempted to move one of the bags. #DallasPDShooting pic.twitter.com/mgbgytBhWv
— Dallas Police Depart (@DallasPD) junio 13, 2015
Picture of squad car that was shot at. No officers were injured. pic.twitter.com/vfT2nCiJzP
— Dallas Police Depart (@DallasPD) junio 13, 2015
The Dallas Morning News
dio detalles sobre la fuga de Boulware por la carretera 45, en que el agresor
disparó contra un punto de control y embistió a una patrulla de la fuerza
policial.
Las informaciones en
tiempo real indican que el ataque no provocó herido alguno, ni deceso de
atacantes o agentes policiales, al igual que aún se mantienen las pláticas de
negociación con el acorralado James
Boulware, quien ha amenazado con volar su propio vehículo con una importante
cantidad de explosivos que, supuestamente, guarda en el vehículo.
Uno de los aspectos
esenciales del hecho inusual en estos tiempos en EEUU es la determinación de
los motivos del mismo. La primera versión coloca al ataque como resultado de la
reacción de Boulware, quien tiene antecedentes por violencia doméstica, causa
por la cual le fuera retirada la custodia de un hijo y por haber sido
calificado como “terrorista” por las autoridades locales. Sin embargo, esta
versión contradice que haya sido una acción personal por cuanto testigos y la
propia policía reconocen la presencia de otros atacantes.
Este hecho en sí mismo
pone de manifiesto no solo el clima de violencia que se vive en EEUU, así como
el fácil acceso de las personas a armamento letal, así como potenciales brechas
en la legislación existente.
Agencias
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