Varios empleados del Departamento de Estado y de la CIA han sido
intimidados por funcionarios no identificados de la Administración de
Obama para que guarden silencio sobre el atentado en Bengasi...
Varios empleados del Departamento de Estado y de la CIA han sido
intimidados por funcionarios no identificados de la Administración de
Obama para que guarden silencio sobre el atentado en Bengasi, según
informó la abogada de uno de ellos.
"No estoy hablando en general, estoy hablando específicamente de
Bengasi, en que las personas han sido amenazadas. Y no sólo el
Departamento de Estado. Las personas han sido amenazadas en la CIA ",
declaró en una entrevista a la cadena Fox News la abogada Victoria
Toensing.
"Si van a quitar el trabajo o la vida de alguien, entonces es una
amenaza", agregó. Asimismo, subrayó que las intimidaciones fueron hechas
de una manera "muy sutil", aunque no reveló más detalles.
La abogada hizo hincapié en que su cliente tenía una información
valiosa que compartir con el Congreso, tanto sobre el propio ataque,
como sobre los días siguientes y la forma en que el atentado fue tratado
por la inteligencia de EE.UU.
Además, dio a entender que otros empleados no han presentado sus
testimonios por miedo a posibles consecuencias y calificó de "alarmante"
el hecho de que la cooperación con los investigadores del Congreso
pudiera poner fin a la carrera de una persona.
El presidente Barack Obama reaccionó a estas declaraciones durante
una conferencia de prensa este martes, afirmando que no era consciente
de ningún informe sobre intimidación a los empleados de la CIA. "No
estoy familiarizado con la idea de que alguien hubiera sido presionado
para no testificar", declaró.
El Departamento de Estado se hizo eco de las palabras del presidente,
indicando también que "el Departamento de Estado nunca toleraría
sanciones o represalias contra los informantes sobre cualquier tema,
incluyendo éste", dijo el portavoz Patrick Ventrell.
El 11 de septiembre del año pasado decenas de hombres armados
asaltaron la representación diplomática de EE.UU. en la segunda ciudad
más importante de Libia. El ataque le costó la vida a cuatro
diplomáticos estadounidenses, entre ellos el embajador Christopher
Stephens.
El ataque sucedió en un contexto de indignación en el mundo musulmán
provocado por una película que denigraba al profeta Mahoma y que
presuntamente fue rodada en EE.UU.
Tomado de http://www.cubasi.cu
No hay comentarios:
Publicar un comentario