A los amigos/as de ALBA
Hay
que denunciar las declaraciones iniciales del Ministro de Exteriores,
Sr. Margallo, por su carácter injerencista que solo sirven a la
desestabilización de un país hermano. El Ministro ha rectificado gracias
a la reacción inmediata y firme del Gobierno de Venezuela. Ya no
estamos en la época de las colonias. Hay que estar claros que la conspiración internacional del
capitalismo en bancarrota no va cesar mientras avance la Revolución
Bolivariana. Es lo mismo que intentaron con Hugo Chávez desde que
comenzó la Gran Recesión y no lo lograron. Ahora tampoco podrán.
Henrique Capriles ya se está conduciendo como un golpista. Al no respetar los resultados y llamar al desorden, Capriles debería ser llevado a los tribunales por participar en laorquestada
campaña para desestabilizar Venezuela. El Plan estaba previsto de
antemano. Aquí no hay nada de improvisación y las acciones del violento
opositor responden a un plan de desorden, como acaba de denunciar por
enésima vez el Gobierno de Venezuela. Y
quieren que dure tiempo, porque es vital para el moribundo dólar. USA
necesita aferrarse al petrodólar ¿Qué mejor manera que enajenar a los
países de la OPEP, como ha hecho con Iraq, Kuwait, Libia....? Ahora van
también a por Venezuela, pero los tiempos son de lucha. También las
multinacionales españolas y europeas necesitan abortar el
independentismo bolivariano, para tener barra librepara el expolio históricamente acostumbrado.
De este Occidente, donde su clase dominante dirigente es tan depredadora, venal y embustera se puede esperar de todo. Hay que pensar que hasta los expertos hackers a sueldo del Pentágono pueden
invadir con virus cualquier sistema informático electoral. ¿Quién
domina hoy la tecnología de las comunicaciones a fondo? Y las grandes
multinacionales, Google, etc., pueden hacer milagros con la informática y
con sus programas. La realidad virtual la construyen con capacidad para
hipnotizar a la opinión pública. Nos tienen controlados pero ignoran
que creciendo la indignación no podrán con las mayorías. Sabemos que la
guerra se da ahí, en el sector mediático, además de librarse en los
mercados financieros y en los rescates. Además de librarse en Siria,
Irán e incluso en las costas de China contra Corea del Norte, donde nos
enteramos que los EEUU son los primeros provocadores. Se silencia que
fue el imperialismo norteamericano el que despedazó Corea con su guerra
en (1950-53), ocasionando cuatro millones de muertos. Corea del Norte no
puede olvidar.
Los bancos occidentales dirigidos por grupos de poder oligárquicos y sus centros de pensamiento (think tanks)
tienen programas capaces de hundir la moneda de un país como Venezuela.
No tienen más que lanzar a la circulación unos miles de millones de
bolívares para hacer estallar la inflación. Con la manipulación del
valor del Dólar pueden hundir los precios en cualquier economía de su
influencia. Si ellos han sido capaces de hundir las bolsas y hacer
tambalear al Euro, como hemos visto con los dictados de las Agencias de Rating,
qué no podrán hacer con monedas menos fuertes. Pero es que además
tienen grandes medios de comunicación que están coordinados entre sí
como se apreció bien en la guerra contrarrevolucionaria de Libia. Son
capaces de hacernos creer que las montañas andan. Aun así, el Gobierno
de Venezuela sabrá defenderse pues cuenta con los sectores populares más
conscientes y mayoritarios del país, cuenta con los pueblos de América
Latina y cuenta muchos de sus Gobiernos y cuenta también con la
Solidaridad Internacional.
Tampoco olvidemos que en toda campaña política de elecciones, el momento final, que es el conteo, está intermediado por medios técnicos, y
ahí ellos hacen fraudes como ha ocurrido con México ya dos veces. Y su
capacidad de ocultación es casi infinita ante la abrumadora presencia de
sus medios de comunicación en complicidad. Por eso el neoliberalismo
sostiene que la única forma de democracia legítima es la suya. Y cuando
pierden, vocean que ha habido “fraude”, para desestabilizar la
democracia que no les es propicia y no tienen reparos en subvertir el
orden y si es preciso recuperar el poder político por la fuerza cuando
no es por las urnas. Lo han hecho una y mil veces. No perdamos la
MEMORIA. Esto no puede olvidarse.
Estados
Unidos pide ahora "otro recuento" y anima a su protegido Capriles a
violentar los cauces legales, para desestabilizar el país, atentando
criminalmente contra la Soberanía, como es su costumbre golpista. Está
claro. Las masas chavistas acabarán saliendo a la calle. La Solidaridad
Internacional debe denunciar este teatro desestabilizador.
O sea, hay que enfrentar este sabotaje que
proviene de las fuerzas más reaccionarias que gobiernan los países de
la UE y de EEUU; de la plutocracia y sus lacayos que temen labancarrota.
Necesitan víctimas, como las fieras, para saciar su apetito de lucro y
alejar el día de su caída en el abismo. Pero toda América Latina, desde
México a Argentina, pasando por Brasil han reconocido a Nicolás Maduro
como vencedor de las elecciones y el violento opositor se desenmascara
como cachorro del imperialismo.
Rusia y China también han respetado el dictamen del Poder Electoral y ya reconocieron la victoria del Nicolás Maduro.
La comunidad internacional que Occidente monopolizaba ayer ya no existe
hoy sin estos dos grandes países cuyas economías tiran del crecimiento
mundial y suman entre ellos el doble de la población occidental y más
del 50% del territorio del planeta. .
Quienes
luchamos dentro de Occidente por un Mundo sin Guerras y de respeto a la
Soberanía de las naciones, quienes luchamos por la Justicia Social y
denunciamos los efectos violentos del neoliberalismo depredador somos
castigados por la represión y el terror de cuerpos armados, cuando por
leyes represivas. Es el mismo capitalismo que nos multa por
manifestarnos libremente contra los efectos de su Depresión, contra los
desahucios, contra la evasión de capitales y el despojo de la clase
trabajadora. Quienes actuamos con voluntad de Solidaridad Internacional,
anticapitalista, antisistema, críticos e incluso los éticamente
decentes que no queremos participar en el festín de la corrupción,
estamos obligados a denunciar a nuestras clases dirigentes, no solo por
los efectos de los Ajustes y la Austeridad, sino también por la política
golpista hacia pueblos como el Venezolano. Está naciendo un Nuevo
Internacionalismo por la Paz y la Soberanía de los Pueblos.
Movilicémonos contra la ofensiva desestabilizadora
Denunciemos la opresión de los medios, la mentira y la guerra psicológica
Unamos nuestras fuerzas con el pueblo de Venezuela
No al golpismo de Capriles
José M. Torres y Purificación G. de la Blanca
Miembros de “OJOS PARA LA PAZ” 
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