El primero de ellos,
develado por PanArmenian.net,
destaca que esta agencia ha logrado éxito en ensayos en humanos mediante la
colocación de implantes cerebrales para lograr el control en el estado de ánimo
y conductual de personas –aparentando el tratamiento de enfermedades mentales
como la esquizofrenia y otros trastornos mentales como el estrés post-traumático,
fundamentalmente en veteranos de guerra– con vistas a insertarlos de manera más
positiva a su entorno social. Sin embargo, este proyecto financiado por DARPA y
desarrollado por dos equipos científicos pertenecientes uno a la Universidad de
California, en San Francisco, y el otro al Hospital de Boston, en Massachusetts,
levanta la suspicacia sobre su posible empleo militar para lograr alterar la
personalidad de los efectivos militares, convirtiéndolos en armas letales
carentes de sensibilidad y escrúpulos. Según los involucrados, estos implantes
enviarían impulsos eléctricos al cerebro para inducir estados mentales
preconcebidos. No es la primera vez que USA emplea programas para el manejo de la mente como lo fue MK Ultra, en el que involucró acerca de 80 universidades, laboratorios y farmacéuticas en su momento.
El otro proyecto de DARPA, develado por Sciencealert.com, así como por El Ciudadano, se denomina Advanced Plant Technologies o APT, y tiene como finalidad monitorear sobre el terreno el comportamiento de una red inteligente de plantas modificadas con ingeniería genética, capaces de alertar aquellos cambios ambientales provocados por intervención de tropas hostiles, ataques químicos, pulsos electromagnéticos u otros agentes de cambio climático, que permita obtener una temprana ventaja sobre las intenciones del potencial enemigo.
El otro proyecto de DARPA, develado por Sciencealert.com, así como por El Ciudadano, se denomina Advanced Plant Technologies o APT, y tiene como finalidad monitorear sobre el terreno el comportamiento de una red inteligente de plantas modificadas con ingeniería genética, capaces de alertar aquellos cambios ambientales provocados por intervención de tropas hostiles, ataques químicos, pulsos electromagnéticos u otros agentes de cambio climático, que permita obtener una temprana ventaja sobre las intenciones del potencial enemigo.
Los cuantiosos gastos
que implican estos proyectos están dirigidos a buscar una mayor ventaja militar
norteamericana sobre otras naciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario