El ya obsoleto y
fuera de foco mediático mercenario Eliécer Ávila y el grupúsculo que encabeza,
Somos+, lanzó una convocatoria para capacitar en el exterior, durante una
semana, a abogados graduados en Cuba, con financiamiento por parte de la Alianza por la Libertad Global
(GLA), suerte de institución que sirve de tapadera a los servicios de
inteligencia norteamericanos. La finalidad de esta convocatoria es que los
seleccionados participen en talleres de defensa legal de derechos humanos en la
Isla. Los requisitos en sí mismo contemplan la disposición de los participantes
en involucrarse ulteriormente en actividades subversivas a tenor con los
requerimientos de la guerra mediática impuesta a Cuba por sus tradicionales
enemigos. Uno de estos requisitos es “haber prestado asistencia legal a
organizaciones de la sociedad civil”, es decir, aquellos grupúsculos
desestabilizadores de la contrarrevolución interna.
Según esta
convocatoria, que vence el 30 de julio venidero, la GLA cubrirá todos los
gastos de visado, pasaje, alimentación y hospedaje de los seleccionados.
The Global Liberty
Alliance aparenta ser una organización sin fines de lucro, inscrita en Estados
Unidos sobre la base legal 501 (c) (3), como un proyecto manejado por el
bufete de abogados Poblete Tamargo LLP, aparentemente con el fin de
ayudar a promover el interés público para “defender los derechos fundamentales
y la libertad”. Tiene su sede en el 510 King Street, Suite 350, en Alexandria, Virginia, VA22314.
En su propia página
web la GLA se muestra como canalizador de fondos para sostener grupúsculos
subversivos, entre los que se destaca el llamado Movimiento Apostólico de Cuba.
La GLA cuenta en su
junta de directores a personas como Terry T. Campo, vinculado estrechamente al
partido republicano, ocupando varios puestos en las administraciones de Ronald
Reagan y George W. Bush, asesorando también a senadores republicanos en temas
relacionados con la seguridad nacional y el terrorismo. En 1989 fue electo
Presidente Nacional de los Jóvenes Republicanos y se encargó directamente de la
capacitación de jóvenes líderes políticos de las democracias emergentes de
Europa del Este y América Latina, es decir, les preparó como figuras de la
derecha y aliados ideológicos de EEUU. Así mismo, se ha desempeñado como
abogado del Comité Nacional Republicano (RNC) en cuatro campañas presidenciales
y para las campañas presidenciales de McCain y Romney en 2008 y 2012, claros
representantes de la ultraderecha norteamericana.
Otro de sus
directivos es Mauricio J. Tamargo es un experto en derecho internacional de
reclamos y reclamaciones contra soberanos extranjeros, incluidos reclamos a
países como Iraq, Libia y Cuba. Trabajó en el Departamento de Justicia
hasta el año 2010, como Presidente de la Comisión de Liquidación de
Reclamaciones Extranjeras de los Estados Unidos (FCSC), en que pasó a fundar el
bufete de abogados Poblete Tamargo LLP.
Antes de servir en la
FCSC, Tamargo ocupó varios puestos principales en el Congreso de los EE. UU.
Incluyendo el Director de Personal y el Asesor Jurídico de tres Comités de la
Cámara, incluidos los siguientes subcomités: Operaciones Internacionales y
Derechos Humanos, Política Económica Internacional y Comercio, y el Subcomité
de África, mientras también se desempeñaba como Jefe de Gabinete y Asesor
General de la congresista Ileana Ros-Lehtinen.
Por su parte, Jason
I. Poblete representa y apoya legalmente a instituciones tales el Departamento
de Estado, el Departamento del Tesoro, el Departamento de Comercio y el
Congreso. Ha sido también un aliado estrecho del Comité Nacional Republicano
desde 1993. Poblete es un experto en procedimientos legislativos y elaboración
de normas administrativas. Concentró su práctica en las siguientes áreas:
cumplimiento comercial, leyes y regulaciones de control de exportaciones para
artículos militares y de doble uso, sanciones económicas y áreas relacionadas
como el boicot, la defensa de Interpol y los derechos humanos. Ha dirigido y
participado en numerosas auditorías de cumplimiento tanto en los Estados Unidos
como en el extranjero, así como en la supervisión e investigaciones del
Congreso. Ha sido un experto en materia de derechos humanos según la visión
norteamericana de los mismos, vinculándose a la Comisión Interamericana
de Derechos Humanos de la OEA. También ha centrado su actividad en el estudio
de la política, seguridad y defensa en el Hemisferio Occidental.
Está claro que los
supuestos bondadosos benefactores de Somos+ no son más que especialistas en la
creación de programas subversivos y se encuentran vinculados estrechamente al
ala ultraderecha republicana, jurada enemiga de la Cuba Socialista. Todo lo que
venga de ellos representa un peligro para nuestra institucionalidad por cuanto
claramente su fin es preparar a mercenarios en acciones subversivas y
desestabilizadoras.