Grupos vinculados a la guerra mediática anticubana han propuesto lanzar
una ofensiva en las redes sociales, fundamentalmente en Twitter y Facebook, a
favor de la campaña manipulada identificada como Cuba Decide. La misma está
preparada para el próximo 25 de octubre –deliberadamente para un día antes de
que Cuba presente ante la Asamblea General de la ONU un nuevo proyecto, que
será sometido a votación en la misma, contra el criminal bloqueo norteamericano
contra la Isla– en un claro intento por predisponer y manipular a la opinión pública internacional con
respecto a la democracia cubana.
Varios sitios contrarrevolucionarios, entre
ellos el de los promotores de Cuba Decide, proponen la realización de un burdo
Plebiscito Vinculante encaminado a buscar una supuesta “transición hacia la
democracia”. De acuerdo con esta convocatoria, dicha indagatoria social se
basaría en la siguiente pregunta:
“¿Está usted de
acuerdo con que se convoque a elecciones libres, justas y plurales, ejerciendo
la libertad de expresión y de prensa; y organizándose libremente en partidos
políticos y organizaciones sociales con total pluralidad? ¿Sí o No?”
Involucrados en este
remedo de encuesta social se encuentran afamados contrarrevolucionarios como el
ex agente de la CIA Carlos Alberto Montaner, así como otros acreditados mercenarios
como Rosa María Payá, Iván Hernández Carrillo, Orlando Luis Pardo Lazo, entre
otros. Detrás de ellos, por supuesto, las sórdidas intenciones de la
ultraderecha anticubana y los EEUU.
Tal inconsistente campaña –dado que no cuenta con el voto y aprobación de la mayoría del pueblo cubano– busca la utópica realización de un plebiscito sobre supuestas elecciones “libres” en Cuba, teniendo como una de sus principales promotoras a la mercenaria Rosa María Payá, la que ha visitado recientemente a la Argentina, Bolivia, Chequia y Nicaragua en busca de apoyo de todo tipo parte de la USAID, la NED y otras fuentes de financiamiento, tratan de estafar a los incautos solicitando donaciones –exentas de impuestos bajo la Sección 501 (c) (3) del Servicio de Impuestos Internos (IRS) para la misma concedida a la Fundación para la Democracia Panamericana. Descaradamente, sin hacer públicos los fondos que reciben por ello– que van desde los 25 USD hasta los 10,000 USD, según los intereses que involucran la simple recarga de celulares, elaboración de propaganda subversiva, promoción, abastecimiento y compra de medios digitales, hasta el adiestramiento de los promotores involucrados en este nuevo circo.
La mercenaria Rosa María Payá ha actuado últimamente en diversos foros, fundamentalmente dirigidos a satanizar a Cuba en la arena internacional sobre la base de la manipulación y el engaño descarado sobre temas relacionados con los derechos humanos y la libertad ciudadana. Ha llegado incluso a vincularse con connotados terroristas para lograr su dudoso rol de rutilante estrella de la contrarrevolución.
Ante este nuevo
intento de revivir infructuosamente a este fétido proyecto
contrarrevolucionario, repito lo antes dicho en uno de mis artículos de
denuncia sobre el mismo: “El proyecto
Cuba Decide es expresión de las ansias de una minoría insignificante cuya
finalidad es desmontar el socialismo en Cuba y dar paso a un capitalismo
excluyente y discriminatorio, lo que equivale a hundir a nuestro pueblo en la
pobreza y arrebatarle los privilegios conseguidos con la Revolución.”
Por supuesto, nuestro
pueblo no se los permitirá.
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