El show huelguístico del contrarrevolucionario Oscar Sánchez Madam, basado en una dudosa auto abstinencia, parece desinflarse. Luego del noveno día queriendo presionar a las autoridades, bajo una cobertura mediática de Radio Martí y las alabanzas de los papagayos de esa emisora, Tomás Cardoso y Cary Roque, miembros del staff detractor, en que ambos reclaman aumentar la manipulación mediática sobre el caso, Sánchez parece verse solo cada día más. Más dramatismo necesita el caso y culpan a sus propios cúmbilas mercenarios de no apoyarlo lo suficiente.
Con su acostumbrada carga de dramatismo, amenazando ¨inmolarse¨ si no le devuelven su laptop, hizo gala de todo tipo de secuelas que le han ido apareciendo, tales como dolores de cabeza y fatigas, aunque nada dice de su estómago, biel lleno por los alimentos de digiere a escondidas. ¿Habrá pedido aguacates a Martha Roque Cabello?
Otra de su peticiones es que el gobierno divulgue información sobre una supuesta ampliación de la epidemia de cólera. Parece ignorar que las autoridades informan regularmente sobre el caso y, eludiendo el amarillismo de la prensa amarillista, desarrolla inmediatas acciones para controlar la enfermedad. ¿Qué más quiere entonces, en realidad, Sánchez Madam? No cabe dudas que busca protagonismo y dinero, así como garantizarse uno que otro viajecito al exterior, engrosando las filas de los turistas políticos de la contrarrevolución, cuyos viajes son sufragados por los enemigos de su Patria.
De esta forma, Oscar Sánchez Madam, sin aparentar desfallecimiento alguno por la abstinencia alimenticia, dio una larga perorata el pasado día 7 en el programa Cuba al día, conducido por Tomás
Cardoso, Cary Roque y Omar López Montenegro, sobre las tres de la tarde, en exclusiva para Radio Martí. Alli se quejó de que solo algunos de sus socios periodistas ¨independientes¨ le han llamado por teléfono, pero han hecho mutis sobre su caso. Y como era de imaginar, el huelguista solicitó encarecidamente recursos, como era de esperarse.
Su mentira mayor fue que ha sido visitado por decena de vecinos de su barrio de Cidra, Matanzas, cuando en realidad todos le repudian sus acciones enemigas y provocadoras.
De esta forma, entrampado en un show mediático que parece salírsele de las manos, Sánchez Madam finge una huelga de hambre ignorado por los mercenarios de mayor calaña, más ocupados en sus viajes al exterior, en ganar dinero y en aumentar su protagonismo personal.
No le doy más días a este show de mentiritas, sazonado con grandes platos de arroz y frijoles y algunas masas de carne de puerco fritas, tostones y otros manjares, injeridos a escondidas de la vista pública.
Percy Francisco Alvarado Godoy
No hay comentarios:
Publicar un comentario