Una
reciente auditoría a la Administración de Seguridad en el Transporte de
Estados Unidos, (TSA, por sus siglas en inglés) muestra que la agencia
tenía empleados a 73 trabajadores vinculados con el terrorismo.
Un
informe de la Oficina del Inspector General (OIG) reveló que aunque el
proceso de escrutinio en varias etapas para los trabajadores del sector
de la aviación fue generalmente efectivo, la agencia no tenía acceso a
información de la lista de vigilancia, necesaria para un juicio más
profundo.
“Nuestra
investigación mostró que TSA no identificó a 73 individuos con códigos
de actividades vinculadas al terrorismo, debido a que TSA no está
autorizada a recibir toda la información relacionada con el terrorismo
bajo la política actual de revisión entre agencias” indica el informe.
OIG recomienda
que TSA pida y revise datos adicionales de la lista de vigilancia del
terrorismo que se mantienen en una base de datos adscrita a la Oficina
del Director de Inteligencia.Nacional.
El
resultado de la auditoría se dio a conocer días después de que saliera a
la luz un informe interno que encontró que controladores de seguridad
en los aeropuertos no detectaron explosivos falsos y armas en la mayoría
de las pruebas llevadas a cabo por agentes federales encubiertos.
El
secretario de Seguridad Interna, Jeh Johnson, cuyo departamento
supervisa a la TSA, anunció posteriormente nuevas medidas para mejorar
los controles de seguridad en los aeropuertos estadounidenses.
No obstante, el inspector General John Roth, durante una intervención en
el Congreso el martes, no dijo si los trabajadores fueron despedidos o
si su acceso a áreas seguras había sido revocado. Los trabajadores
habrían sido empleados por las compañías aéreas, las autoridades
aeroportuarias o vendedores aeropuerto.
En una versión no clasificada de
ese informe, la TSA reconoció que los posibles empleados se
considerarían "una amenaza para la seguridad del transporte."
El informe recomienda que TSA pida y revise datos adicionales de la lista de vigilancia de terrorismo.
El informe surge días después que
se conoció un informe interno que encontró que los controladores de
seguridad en los aeropuertos no detectaron explosivos falsos y armas en
la mayoría de las pruebas llevadas a cabo por agentes federales
encubiertos.
El secretario de Seguridad
Nacional, Jeh Johnson, cuyo departamento supervisa la TSA, anunció
posteriormente nuevas medidas para mejorar los controles de seguridad en
los aeropuertos estadounidenses.
Agencias
No hay comentarios:
Publicar un comentario