La aviación y la artillería israelíes han continuado bombardeando la
Franja de Gaza durante el día de hoy, especialmente la zona fronteriza
con Egipto, con un balance de al menos 67 muertos, en su inmensa mayoría
civiles, que eleva el cómputo de palestinos muertos desde el 8 de julio
a 1.667, mientras que el número de heridos supera los 8.900.
Los bombardeos más intensos se produjeron a lo largo de la pasada
noche en la ciudad de Rafah y su entorno, donde desde ayer han muerto
más de 160 palestinos, incluidos un gran número de mujeres y niños.
En el frente diplomático Israel ha anunciado que no acudirá a la
convocatoria que ha hecho Egipto para negociar un alto el fuego.
El gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu alega que Hamás no
respeta ninguna tregua y por lo tanto no tiene sentido hablar sobre
esta cuestión “hasta nueva orden”.
En medios políticos israelíes se comenta que Netanyahu ha decidido
llevar adelante la invasión de Gaza hasta conseguir una rendición de
Hamás y las demás milicias.
La intención del primer ministro sería obligar a Hamás a aceptar lo
que Netanyahu llama “calma a cambio de calma” sin tener que ceder en
ningún otro aspecto, como el bloqueo de Gaza o la liberación de los
prisioneros palestinos de Cisjordania que el ejército detuvo cuando se
inició esta crisis en el mes de junio.
La última oleada de destrucción sistemática que ha sacudido la Franja
en las últimas horas comenzó en la mañana de ayer, cuando un teniente
israelí desapareció en combate en el área de Rafah.
Israel inmediatamente acusó a Hamás de haber roto la tregua de tres
días que había entrado en vigor a las 8 de la mañana, según habían
anunciado previamente el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y el
secretario de Estado, John Kerry.
Sin embargo, Hamás respondió que esta operación, en la que murieron
otros dos soldados, fue ejecutada a las 7 de la mañana, es decir una
hora antes de que comenzara la tregua, y no a las 9.30 como sostiene
Israel.
Tras el duro e indiscriminado castigo contra el área de Rafah, Hamás
ha anunciado que no tiene en su poder al teniente desaparecido en
combate, y que probablemente este murió durante los bombardeos
israelíes, si es que alguna vez llegó a estar en poder de las brigadas
"Azedim Al Kasam", las milicias de Hamás.
Una parte de la delegación interpalestina que tenía que participar
desde hoy mismo en las negociaciones de El Cairo ha salido hacia Egipto,
pero después del anuncio de la ausencia de los israelíes, no podrá
discutir los términos de un nuevo alto el fuego.
La delegación interpalestina está integrada por representantes de Al
Fatah, el partido del presidente Mahmud Abás, que han salido de Ramala, y
representantes de Hamás, la Yihad Islámica y otras facciones palestinas
del exterior de los territorios ocupados y no de la Franja de Gaza.
Mientras tanto, la Unión Europea ha elaborado una lista de propuestas
que incluyen la apertura de todos los pasos de la Franja de Gaza para
bienes y personas, y el establecimiento de una línea marítima entre Gaza
y el puerto chipriota de Larnaca para enviar ayuda humanitaria.
Pero estas propuestas carecen de sentido en el contexto actual. La UE
únicamente sirve para financiar la ocupación israelí de Cisjordania
manteniendo artificialmente al gobierno de Ramala con generosas ayudas
económicas que contribuyen a incrementar la ocupación.
Por Eugenio García Gascón
Ria Novosti
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