La Casa Blanca ordenó a su representación permanente en la ONU que
se dedique a sabotear la iniciativa brasileña de promover un debate
internacional sobre el espionaje masivo [1].
Fuertes presiones se ejercen actualmente para impedir la presentación
de un proyecto de resolución sobre esa cuestión en la Asamblea General
de la ONU.
Estados Unidos afirma que no tiene ninguna obligación al respecto
fuera de sus propias fronteras y que el Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos no se aplica al espionaje.
Washington ya recurrió anteriormente a esos mismos argumentos para
negar la responsabilidad estadounidense en el tema de los secuestros y
torturas que practica la US Navy contra los personas retenidas en la base naval que Estados Unidos mantiene ilegalmente en el territorio cubano de Guantánamo.
Según decisiones de la Corte Europea de Derechos Humanos (en la que
se incluye Rusia) y de la Corte Penal Internacional, todos los Estados
tienen la obligación de respetar los Derechos Humanos, incluso fuera de
sus propias fronteras.
[1] «ONU: Preparan proyecto de resolución contra el espionaje de Estados Unidos», Red Voltaire, 26 de octubre de 2013.
http://www.voltairenet.org
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