Ultraderecha sionista pide seguir con genocidio en Gaza

 

Los ministros israelíes de Exteriores, Aviagdor Lieberman, y Economía, Naftali Bennett, líderes de la ultraderecha nacionalista y pro colona judía, pidieron hoy continuar con la ofensiva militar en Gaza.

En declaraciones divulgadas por la prensa israelí, Lieberman criticó con dureza al primer ministro, Benjamin Netanyahu, por no convocar el gabinete de seguridad tras la ruptura de la tregua el martes y reiteró su exigencia de que no se negocie con los palestinos.
"No convocó al gabinete porque no quiere que se presente y se vote una decisión sobre una acción decisiva. Está en el frente duro pero espera que algo pase y que un acuerdo con Hamás se logre rápido", afirmó el canciller.
"La política del gobierno de responder con calma a la calma es completamente errónea. Nosotros solo debemos hablar y negociar con Hamás cundo esté completamente rendido", explicó Lieberman, citado por la edición digital del diario Yediot Aharonot.
"Debemos buscar un rápido y total fin de Hamás", recalcó en una reunión hoy con los diputados de su partido, incluido en la coalición de Gobierno y hasta el inicio de la ofensiva, socio del Likud de Netanyahu.
Según expertos israelíes, el enfrentamiento entre estos antiguos aliados se ha ahondado progresivamente desde incluso antes del inicio de la ofensiva.
En la misma línea, su colega de gabinete Naftali Bennett, pidió una acción más dura que conduzca a lo que definió como "una victoria decisiva".
"Cuando lo que se pretende es derrotar a una organización terrorista, es necesaria una victoria decisiva. Cuando dialogamos con terroristas, solo conseguimos mucho más terror", afirmó.
"Hamás cree que el disparo de cohetes les ayuda a lograr sus objetivos en las conversaciones y disparan incluso durante el alto el fuego. Los cohetes no se lanzan a la ligera, sino de forma sistemática", agregó.
Al hilo de esta argumentación, Bennett, que junto a Lieberman fue uno de los miembros del gabinete que más presionó para que se lanzara una ofensiva en la que ya han muerto más de 2.000 palestinos, en su mayoría civiles, reiteró que la destrucción total de Hamás es imperativa.
"Solo una respuesta severa, como la que daría cualquier nación soberana si lanzaran cohetes contra su territorio, permitir frenar el deterioro. Pronto o tarde, Israel debe arrodillar a Hamás, no hay manera de evitarlo", concluyó Bennet, citado por el mismo diario.

 

Tomado de  http://www.wradio.com.co