El 13
de febrero de 2012, Thierry Meyssan revelaba a la primera cadena de televisión
rusa que Siria había hecho prisioneros a una docena de militares
franceses. La Red Voltaire está en condiciones de confirmar que el 26 de febrero
el número de prisioneros franceses se eleva a 18.
Si Paris admite que ellos han actuado enviados en misión, ellos se beneficiarían del estatuto de prisioneros de guerra y serían protegidos por la Convención de Ginebra, pero si París niega haberlos enviado ellos serían considerados como civiles extranjeros, serían juzgados en Siria por sus crímenes y se exponen a la pena de muerte.
Si Paris admite que ellos han actuado enviados en misión, ellos se beneficiarían del estatuto de prisioneros de guerra y serían protegidos por la Convención de Ginebra, pero si París niega haberlos enviado ellos serían considerados como civiles extranjeros, serían juzgados en Siria por sus crímenes y se exponen a la pena de muerte.
Francia ha abierto tres canales de negociación, vía la Federación de Rusia, los Emiratos Árabes unidos y el Sultanato de Omán. El embajador de Francia, Éric Chevallier, ha retornado el 23 de febrero de urgencia a Damasco. Koffi Annan ha sido llamado como mediador por la ONU y la Liga Árabe.
Consciente del uso que se
puede hacer de estas detenciones en periodo electoral francés, Damasco ha pedido
a los medios públicos sirios no tocar este tema por el momento. Se reserva así
la posibilidad de tratarlo en secreto si esta opción es más ventajosa. Siempre
admitiendo el carácter excepcional de esta situación, los periodistas sirios,
que se han habituado rápidamente a la libertad de expresión garantizada por la
nueva ley de prensa, deploran que de nuevo se impongan límites por motivos de
seguridad nacional.
Si las negociaciones quedan
secretas, Francia deberá pagar bajo cuerda indemnizaciones de guerra
particularmente pesadas, sea en metálico sea en forma de privilegios económicos.
Si ellas se hacen públicas, Francia puede esperar indemnizaciones menos
onerosas, pero Nicolás Sarkozy y Alain Juppé deberán dar explicaciones a sus
conciudadanos. Quedaría hipotecada entonces su posibilidad de ganar las
elecciones presidenciales, y arriesgando incluso, el presidente ser llevado ante
el Tribunal Supremo (artículos 35 y 68 de la Constitucion).
Cuando el asunto del Rainbow Warrior (1985), con el resultado de un barco hundido y una persona muerta, Francia presentó excusas oficiales, y pagó indemnizaciones de 7 millones de dólares a Nueva Zelanda y 8,16 millions de dollars à Greenpeace. Sobre todo, París debió autorizar la importación de ovinos neozelandeses, destruyendo parte de su propia cabaña ovina. A cambio los dos agentes franceses prisioneros habían sido liberados. Ironías de la historia, Laurent Fabius, el Primer Ministro cuyo gobierno había ordenado el ataque al Rainbow Warrior se presiente como Ministro de Asuntos Exteriores de François Hollande, en caso de la elección del candidato socialista a la presidencia de la República. Este último es el excuñado del lugarteniente coronel Gérard Royal, el comandante de esta operación.
En la guerra secreta contra
Siria, Francia y sus aliados son responsables de un conflicto que ha llevado a
la muerte al menos a 3.000 soldados sirios y a 1.500 civiles, a los cuales se
agregan pérdidas económicas y sabotajes de infraestructuras estimadas en al
menos 3.000 millones de dólares.
Source : Wikistrike
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