Fabricar un montaje mediático, cosa de truhanes.

Percy Francisco Alvarado Godoy

Jorge Luis García Pérez, Antunez, y su esposa. pillos de oficio

Como de truhanes se trata el asunto, nadie debe de sorprenderse con los artilugios a los que acuden los mercenarios USA para procurarse unos dólares para sus bolsillos, generalmente sobre la base de fabricar infundios, hacerse víctimas improvisadas de golpeaduras, disfrazar como presos de conciencia a delincuentes comunes, inventar huelgas de hambre, y todo tipo de noticia que complazca a quien paga. De eso se trata precisamente el asunto: tratar de dejar "mal parada" a Cuba en el controvertido tema de los derechos humanos, aunque ello implique edificar falsedades.

Debo de aceptar que en esto de fabricar mentiras, la minúscula contrarrevolución interna ha ido tomando cierta experiencia, buscando el momento propicio para obtener aprobación y reconocimiento de sus amos, quienes son los encargados del sobredimensionamiento mediático internacional y de levantar una ola de satanización contra Cuba, sin comprobar siquiera la veracidad de sus fuentes.

La oportuna denuncia de  mi colega Norelys Morales Aguilera, desenmascaró una de estas patrañas más recientes. Veamos cómo se fabrica uno de estos eventos:

En ocasión de celebrarse el 24 de febrero, dos pillos de oficio y oportunistas envilecidos por el dinero de sus promotores en el negocio de la contrarrevolución en la parte central de la Isla, Jorge Luis García Pérez (Antúnez) y su esposa, Iris Tamara Pérez Aguilera, elaboraron días antes una nota que harían llegar vía telefónica a Radio Martí y a otros miembros de la blogósfera anticubana, siguiendo la misma matriz de comportamiento:

 "Yo invento, tú llamas y avisas, ellos lo difunden y luego pagan."

La Nota falsa en cuestión, que debía aparecer hoy, reza lo siguiente:

"Iris Tamara Pérez Aguilera, esposa del opositor Jorge Luis García Pérez, Antunez, fue  golpeada en la mañana del 24 de febrero, en Placetas, Villa Clara, por sicarios del régimen castrista". 

Pérez Aguilera, según se pudo comprobar con sus vecinos, durmió anoche en su domicilio, gozando de una   perfecta salud y, es obvio,  esperando por el billetico que le llegaría pronto para pagar su afiebrada mentira.

Nota falsa que debía salir hoy por la tarde.

La oportuna denuncia de la patraña dejó a los dos embaucadores en ridículo, pues nadie ha inventado cosa alguna, ni ha habido manipulación. Los propios implicados pueden dar veracidad de que la nota fue escrita por ellos, sin necesidad de un calígrafo experto.

¿Qué dirán, me pregunto, Yoani y El Camaján, la gente de Cubanacán Press y Radio Martí, sobre esta falacia que estaban prestos a divulgar? Lección como ésta les debe hacer pensar mejor que "con pillos y mentirosos, se van directo al pozo."