Caracas,
22 mar (PL) El candidato presidencial opositor venezolano Henrique
Capriles perdió los estribos, enloqueció, es una mezcla de desesperación
con arrogancia lo que lo invade, afirma hoy la habitual columna Piedra
de Tranca, del capitalino diario Vea.
Firmado como es costumbre con el seudónimo de Marciano, el artículo
expresa que Capriles "se sabe derrotado por (Nicolás) Maduro, lo cual lo
saca de quicio, porque es la sempiterna reacción del oligarca frente al
logro de la gente de origen humilde".
Al principio se cobijó
bajo la piel del cordero que le pusieron los asesores para llegar a los
indecisos, pero la estrategia no le sirvió y el fallecido presidente
Hugo Chávez lo aplastó, le sacó 12 puntos de ventaja cuando se hacia la
ilusión de derrotarlo, añade en alusión a las elecciones del pasado 7
de octubre.
"Cuando la enfermedad del presidente, se ensañó
contra él, su familia y sus compañeros. Cuando ocurrió el deceso hizo lo
mismo: Ofensas simuladas o abiertas. Luego, ante el repudio nacional
que suscitó esa actitud, recogió velas. Dejó quieto al comandante y la
emprendió contra Maduro", escribe el columnista.
Por otra parte,
la columna le dedica espacio a un editorial recientemente aparecido en
el diario El Nacional donde se refiere a la presidenta del Consejo
Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, de modo "abyecto,
desconsiderado, inhumano".
"Precisamente contra una mujer ejemplar por su temple, por su coraje, por su patriotismo", añade el periodista
También
manifiesta que "para algunos lo más escandaloso del referido editorial
es que, en el fondo, constituye una expresión de solidaridad con la
subsecretaria de Estado (de los Estados Unidos) para América Latina, la
señora (Roberta) Jacobson".
La presidenta del CNE defendió a ese
organismo del ataque "desconsiderado y falso de la funcionaria
norteamericana" contra el poder electoral venezolano, agrega.
Finalmente, y con respecto a ese tema, se pregunta el columnista cómo
calificar la actitud de un medio que en vez de guardar silencio se pone
del lado de quien agrede al país.
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