Quiere decir que el periodista de renombre mundial que
desde junio del año pasado se refugia en la embajada de Ecuador en
Londres, saldrá en libertad.
Tal hipótesis permite
hacerla la reciente declaración del titular de Exteriores de Ecuador
Ricardo Patiño. Según él, después de salir reelegido por un tercer plazo
el presidente ecuatoriano Rafael Correa, "el Reino Unido ya sabe que en
cuatro años más, la decisión del gobierno sobre caso Assange es
inquebrantable”". En relación con esto el ministro espera que ya este
año las partes puedan llegar a un compromiso respecto al destino del
australiano.
Mover a los británicos a cesar la
persecución contra Assange puede no solo la firme postura del líder
ecuatoriano. Sea suficiente recordar las causas de la "reclusión
voluntaria" del fundador de WikiLeaks. Optó por tal destino no
por las "ridículas", en su decir, acusaciones de la parte sueca. Un
peligro real al periodista proviene de EEUU, a donde se lo puede traer
desde Estocolmo. La falsa violación es respuesta del Pentágono a los
materiales secretos que publicó sobre las acciones de los uniformados
norteamericanos en Irak, asevera Assange. Y por tales "errores"
Washington castiga muy duro, hasta con la pena capital.
Por
paradójico que se parezca, la salvación al australiano puede venir
también del otro lado del océano. En estos días en EEUU concluye el
proceso contra el soldado norteamericano Bradley Manning, acusado de
haber revelado muchos documentos secretos y haberlos entregado a WikiLeaks.
El material más escandaloso fue el vídeo sobre el fusilamiento por
soldados norteamericanos de civiles iraquíes. La grabación armó un
sonado escándalo en EEUU y en todo el mundo. Y la figura de Manning,
como escribió el rotativo británico The Independent, pasó a ser "un símbolo de la hipocresía norteamericana".
Julian
Assange espera que este proceso judicial permita abrir los ojos a la
ciudadanía mundial sobre el papel de EEUU en el mundo contemporáneo y
obligue a muchos a ver de una manera nueva la situación en torno al
fundador de WikiLeaks:
–El proceso contra
Manning es una zurra ostentativa para todos los que tratan de abrir los
ojos a la gente. Esto comprueba las condiciones humillantes de su
mantenimiento bajo vigilancia. Ninguno de los presos de EEUU no ha
pasado tanto tiempo en una celda de reclusión preventiva, dijo Assange, recordando que el soldado norteamericano fue arrestado en 2010.
En
dependencia de la sentencia a Manning –esta se dictaminará el 15 de
marzo- Assange amenaza con publicar una porción más de documentos sobre
las fechorías castrenses de EEUU. En este caso actuará como acusador,
apoyado por toda la comunidad mundial.
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