El presidente sirio, aunque parece haber aceptado el principio de un
posible arreglo diplomático, sigue empleando una dialéctica desafiante.
El mandatario advierte de consecuencias impredecibles si Estados Unidos
decide bombardear siria:
“ Nadie puede decir cuáles serán las repercusiones de un ataque, ya
que estamos hablando de una gran región, no sólo de Siria. Es una región
interconectada, con muchos nexos de unión. Si golpeas en un sitio,
debes esperar algún tipo de consecuencia en otra zona, consecuencias que
pueden tener formas diversas”
Al Assad insiste en que él no ordenó el supuesto ataque químico del
21 de agosto en Damasco. Los dos rehenes occidentales liberados el fin
de semana en Siria cuentan haber escuchado en cautiverio una
conversación entre rebeldes en la que decían que el ataque lo efectuaron
grupos insurgentes para forzar una intervención extranjera.
Tomado de http://es.euronews.com
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