Aunque
Barack Obama anunció hace dos años que reduciría las escuchas en las de la NSA
hacia sus socios, luego de que se destapara el descarado espionaje
norteamericano contra sus aliados, se ha comprobado que aún mantiene un secreto
monitoreo contra Israel.
Las
conversaciones del primer ministro Benjamin Netanyahu y otros altos
funcionarios judíos de mantuvieron empero, con el mayor secreto posible, sobre
todo durante el diálogo con Irán sobre armas nucleares, incluyendo el monitoreo
de congresistas vinculados a Israel y los miembros de lobby judío en el
Congreso, según informó Infowars.
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