El aeropuerto de Miami se convirtió en lugar para recordar a las víctimas de los atentados terroristas del 11
de septiembre de 2001, donde empleados del Aeropuerto de Miami, unidos a
oficiales del Departamento de Seguridad Interna (DHS), la Policía de
Miami-Dade y los bomberos, colocaron una ofrenda floral en el asta de
la bandera.
Todo el mundo conoce ampliamente el suceso que enlutó a América, sorprendió al mundo y sirvió como excusa para que EE UU lanzará una cuestionada guerra antiterrorista por todos "los oscuros rincones" del planeta.
Según el Miami Diario, el portavoz del Aeropuerto de Miami, John Heffernan, señaló
que "el compromiso de todos los empleados del MIA es no olvidar a las
víctimas de los atentados terroristas, por eso cada año realizamos este
acto".
Lo cierto es que tanto agentes federales y estatales de Miami ignoren deliberadamente que cohabitan con terroristas de varias naciones, entre ellos muchos de origen cubano, quienes atentaron, incluso, contra este propio aeropuerto y otras instalaciones de este mismo tipo en EE UU. Hoy deambulan libres por todo Miami.
También se hacen de la vista ciega -sorpendentemente-, con respecto a abominables crímenes cometidos particularmente contra el pueblo cubano.
No es honesto recordar solo a las víctimas de terrorismo de forma parcializada. Luchar contra este flagelo y su eliminación ha de ser compromiso de todos.
Parcy Francisco Alvarado Godoy
No hay comentarios:
Publicar un comentario