La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos
informó hoy que el conflicto armado en el este de Ucrania ha dejado tres
mil 660 muertos, ocho mil 756 heridos y más de 375 mil desplazados.
Según el sexto reporte sobre la situación de los derechos humanos en el
convulso país, esas cifras corresponden al período entre mediados de
abril y el pasado 6 de octubre, en el cual se enfrentaron tropas
gubernamentales apoyadas por grupos paramilitares contra rebeldes
federalistas en la región del Donbass.
Pese al cese de hostilidades anunciado el mes pasado, los choques y bombardeos de áreas civiles han continuado casi a diario, sobre todo en zonas de las ciudades de Donetsk y Lugansk, precisa el documento presentado en Ginebra por el alto comisionado Zeid Raâ Öad Al Hussein.
Desde la entrada en vigor del alto el fuego, el 6 de septiembre, al menos 331 personas perdieron la vida en el este ucraniano, donde la crisis devino batalla política entre Rusia y Occidente (Estados Unidos y la Unión Europea), que apoyaron el golpe de Estado de febrero contra Víktor Yanukóvich y la ofensiva para desalojar a las milicias opuestas a la asonada.
Pese al cese de hostilidades anunciado el mes pasado, los choques y bombardeos de áreas civiles han continuado casi a diario, sobre todo en zonas de las ciudades de Donetsk y Lugansk, precisa el documento presentado en Ginebra por el alto comisionado Zeid Raâ Öad Al Hussein.
Desde la entrada en vigor del alto el fuego, el 6 de septiembre, al menos 331 personas perdieron la vida en el este ucraniano, donde la crisis devino batalla política entre Rusia y Occidente (Estados Unidos y la Unión Europea), que apoyaron el golpe de Estado de febrero contra Víktor Yanukóvich y la ofensiva para desalojar a las milicias opuestas a la asonada.
El nuevo informe, al igual que los anteriores, responsabiliza a las partes en conflicto de violaciones de los derechos humanos, aunque su enfoque apunta a subrayar a los sectores que proclamaron la independencia de Donetsk como los mayores culpables.
Moscú ha criticado el reporte por considerarlo parcial y carente de algunos elementos, una situación que medios de prensa han advertido en el texto divulgado hoy, porque no menciona el reciente hallazgo de tumbas colectivas con cientos de cuerpos de civiles y combatientes federalistas asesinados -de acuerdo con denuncias- por la Guardia Nacional.
A propósito del documento, el Alto Comisionado llamó a respetar el cese el fuego y a investigar con profundidad todas las graves violaciones de las leyes internacionales humanitarias, entre ellas el bombardeo indiscriminado de zonas residenciales.
Aún después de anunciado el alto en las hostilidades, las fuerzas gubernamentales han mantenido los ataques artilleros contra las ciudades rebeldes, como los que provocaron la muerte de un colaborador suizo de la Cruz Roja Internacional y de civiles masacrados por el impacto de un proyectil en una escuela.
El pasado jueves, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se declaró consternado por estos hechos y reiteró la necesidad de buscar una salida política a la crisis.
En Ucrania están desplegados 35 monitores de los derechos humanos, quienes suministran datos para los reportes de la Oficina del Alto Comisionado. (PL)
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