El Líbano ordenó el jueves la
pena capital contra 18 supuestos miembros del grupo takfirí EIIL (Daesh,
en árabe), entre ellos Ahmad Miqati, uno de los más altos dirigentes de
esa banda, por haber planeado la creación de un “emirato” en el norte
de este país.
Estos terroristas, cuya nacionalidad e identidad no han sido publicadas, también han sido acusados, entre otros, de organizar ataques contra el Ejército de El Líbano y conspirar para ocupar aldeas de Diniye en el norte del país.
Sin embargo, entre los sentenciados a muerte, solo tres han sido detenidos por las fuerzas libanesas, incluido Miqati, y los otros 15 siguen prófugos y su caso fue remitido al juez de instrucción.
Por medio de un comunicado emitido el pasado 23 de octubre, durante una redada en la región de Diniye, el Ejército de El Líbano informó del arresto de Miqati, apodado Abu Hoda, y su hijo acusados de la decapitación de un militar libanés.
Miqati confesó en que el objetivo principal de sus operaciones en El Líbano ha sido crear un “emirato de Daesh” en el norte libanés y, de esa manera, facilitar la conexión de la región siria de Al-Qalamun al mar Mediterráneo. HispanTV
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